¡Hola a todos! Hoy en Ciudad Jardín, residencias de mayores en Cáceres, te contamos todo lo que debes saber sobre la artrosis degenerativa y los cuidados necesarios para sobrellevar esta enfermedad degenerativa.
La artrosis degenerativa
Según la OMS, la artrosis degenerativa, también conocida como osteoartritis, es una enfermedad crónica que afecta a las articulaciones. Se caracteriza por el desgaste del cartílago y el deterioro de la articulación, lo que puede causar dolor, inflamación y dificultad para mover la articulación afectada.
La artrosis degenerativa es, según la OMS, la cuarta causa de discapacidad en el mundo y se estima que afecta a más del 30% de las personas mayores de 65 años. Aunque la enfermedad puede afectar cualquier articulación del cuerpo, las articulaciones más comúnmente afectadas incluyen las rodillas, caderas, manos y columna vertebral.
Síntomas de la artrosis degenerativa
Los síntomas de la artrosis degenerativa varían de persona a persona, pero algunos de los síntomas más comunes incluyen:
- Dolor en las articulaciones: el dolor puede ser constante o intermitente y puede ser peor después de estar sentado o en reposo durante un largo período de tiempo.
- Rigidez en las articulaciones: la rigidez puede ser más acentuada por la mañana o después de estar sentado o en reposo durante un largo período de tiempo.
- Hinchazón en las articulaciones: la hinchazón puede ser causada por la inflamación y puede ser más evidente después de actividad física.
- Pérdida de movilidad: las articulaciones afectadas pueden ser difíciles de mover o se pueden bloquear.
- Crepitación o chasquido al mover las articulaciones: esto se debe a la fricción entre los huesos y el cartílago deteriorado.
- Debilidad muscular: el dolor y la rigidez pueden causar debilidad en los músculos cercanos a las articulaciones afectadas.
- Fatiga: el dolor y la rigidez pueden causar fatiga y cansancio.
Es importante mencionar que la artrosis degenerativa puede afectar a cualquier articulación del cuerpo, pero las más comúnmente afectadas son las rodillas, caderas, manos, columna vertebral y la articulación de la base del pulgar. Si sospechas que tienes artrosis, es importante que consultes a un médico para recibir un diagnóstico correcto y un tratamiento adecuado.
¿Cuáles son los factores de riesgo de la artrosis degenerativa?
Entre los factores de riesgo que favorecen el desarrollo de la artrosis degenerativa encontramos los siguientes:
- Edad: el riesgo de desarrollar artrosis aumenta con la edad. La mayoría de las personas mayores de 65 años tienen algún grado de artrosis.
- Sobrepeso u obesidad: el exceso de peso puede aumentar el estrés en las articulaciones y aumentar el riesgo de artrosis.
- Lesiones en las articulaciones: las lesiones repetitivas o traumáticas en las articulaciones, como las sufridas por deportistas o trabajadores manuales, pueden aumentar el riesgo de desarrollar artrosis en esa articulación.
- Antecedentes familiares: si alguien en tu familia ha desarrollado artrosis, es más probable que tú también la desarrolles.
- Profesiones que implican movimientos repetitivos: trabajos que requieren movimientos repetitivos, como el de un mecánico, pueden aumentar el riesgo de desarrollar artrosis en las articulaciones de las manos y los dedos.
- Sedentarismo: un estilo de vida sedentario puede contribuir a la debilidad muscular y aumentar el riesgo de artrosis.
- Otros factores incluyen: enfermedades como la diabetes o el síndrome metabólico, fumar, tener una dieta baja en calcio y vitamina D, y tener una mala postura.
Es importante mencionar que la artrosis degenerativa no tiene cura pero se pueden manejar los síntomas con ejercicios, medicamentos, y terapias físicas.
Cuidados para la artrosis degenerativa
Aunque no hay una cura para la artrosis degenerativa, hay varias opciones de tratamiento disponibles para ayudar a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas. Estos tratamientos incluyen:
- Ejercicio. El ejercicio regular es esencial para mantener las articulaciones móviles y fortalecer los músculos que las rodean. Se recomienda hacer ejercicios de bajo impacto, como caminar, nadar o hacer bicicleta estática.
- Control de peso. El sobrepeso puede aumentar la presión en las articulaciones y agravar los síntomas de la artrosis degenerativa. Es importante trabajar con un nutricionista para establecer un plan de alimentación saludable y perder peso de manera segura.
- Terapia física. La fisioterapia puede ayudar a mejorar la flexibilidad, la fuerza y la estabilidad en las articulaciones afectadas.
- Medicación. Los analgésicos y antiinflamatorios pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación. Se recomienda hablar con un médico para encontrar el tratamiento adecuado.
- Protección de las articulaciones. Es importante evitar actividades que causen sobreesfuerzo o lesiones en las articulaciones afectadas, y utilizar dispositivos de ayuda como bastones o muletas si es necesario.
- Alimentación saludable. Una dieta rica en nutrientes y baja en grasas saturadas ayudará a mantener un peso saludable y a reducir los síntomas.
- Descanso adecuado. Es importante descansar y elevar las articulaciones afectadas cuando se sienta dolor o inflamación.
Un gran porcentaje de personas mayores padecen esta enfermedad, por eso desde Ciudad Jardín, residencias para ancianos en Cáceres, queremos compartir esta información y ayudarles a tener una vida con menos dolor. Es importante cuidar sus articulaciones y llevar a cabo todos los consejos anteriores.
¡Y esto es todo por hoy! Esperamos que le sirva de ayuda nuestro artículo y no dude en contactar con nosotros para cualquier duda, estaremos encantados de ayudarle. Sigue de cerca nuestro blog para no perderte las últimas noticias. ¡Hasta la próxima!